El dúo de rap funk que Dante Spinetta y Emmanuel Horvilleur impulsaron en los 90s dará un show el 13 de octubre en el Anfiteatro de Puerto Madero en el marco del Movistar Free Music.
En 1995 uno podía prender la tele y encontrarse con dos locos rimando violentamente una canción psicodélica que repetía “abarajame en la bañera, nena”, en medio de un escenario que mezclaba película de Jackie Chan con berretismo al mejor estilo Todo x 2 pesos. Esos dos locos eran Dante y Emmanuel que, separándose de la dirección artística de sus padres Luis Alberto Spinetta y Eduardo Martí, mezclaron rock, soul, funk y rap para dar a la luz a Illya Kuryaki & The Valderramas.
El dúo nació a raíz de un simple juego. Cuando los muchachos eran niños se la pasaban en la sala de ensayo haciendo música anti infantil. Toda esa burla fue tomando forma y en 1991 salió a la venta Fabrico Cuero, un disco de rap con poco sentido y canciones pegadizas. Más adelante editaron Horno Para Calentar los Mares, que mostró un crecimiento más rockero y una seriedad un poco más notable a la hora de encarar las letras.
El éxito rotundo llegó con el lanzamiento de Chaco (1995), un disco elemental en la historia del rock nacional. En esta obra los Illya Kuryaki coqueteaban con el funk, el soul, el rock, el rap y las baladas acústicas. Todo coronado con rimas repletas de delirio y, a la vez, amor y conciencia. La aceptación que tuvo con el público fue masiva y el dúo terminó llenando Obras y realizando un MTV Unplugged. Ya habían dejado de ser “los hijos de”, título que arrastraron sin ganas durante algunos años.
Posteriomente IKV lanzó dos discos más (Versus y Leche) y a principios del milenio se separaron en buenos términos para que cada uno siga su camino: Dante se inclinó por el hip hip y Emmanuel por el pop. En octubre los veremos juntos otra vez, una gran noticia.
En 1995 uno podía prender la tele y encontrarse con dos locos rimando violentamente una canción psicodélica que repetía “abarajame en la bañera, nena”, en medio de un escenario que mezclaba película de Jackie Chan con berretismo al mejor estilo Todo x 2 pesos. Esos dos locos eran Dante y Emmanuel que, separándose de la dirección artística de sus padres Luis Alberto Spinetta y Eduardo Martí, mezclaron rock, soul, funk y rap para dar a la luz a Illya Kuryaki & The Valderramas.
El dúo nació a raíz de un simple juego. Cuando los muchachos eran niños se la pasaban en la sala de ensayo haciendo música anti infantil. Toda esa burla fue tomando forma y en 1991 salió a la venta Fabrico Cuero, un disco de rap con poco sentido y canciones pegadizas. Más adelante editaron Horno Para Calentar los Mares, que mostró un crecimiento más rockero y una seriedad un poco más notable a la hora de encarar las letras.
El éxito rotundo llegó con el lanzamiento de Chaco (1995), un disco elemental en la historia del rock nacional. En esta obra los Illya Kuryaki coqueteaban con el funk, el soul, el rock, el rap y las baladas acústicas. Todo coronado con rimas repletas de delirio y, a la vez, amor y conciencia. La aceptación que tuvo con el público fue masiva y el dúo terminó llenando Obras y realizando un MTV Unplugged. Ya habían dejado de ser “los hijos de”, título que arrastraron sin ganas durante algunos años.
Posteriomente IKV lanzó dos discos más (Versus y Leche) y a principios del milenio se separaron en buenos términos para que cada uno siga su camino: Dante se inclinó por el hip hip y Emmanuel por el pop. En octubre los veremos juntos otra vez, una gran noticia.